Por ese motivo, el secretario general de la federación, Jaime Cedrún, ha remitido un carta al rector de la Universidad Complutense, Gustavo Villapalos, en la que critica la decisión de la gerencia y exige su corrección inmediata.

Según CCOO, la Universidad Complutense se negó a contratar al trabajador minusválido, a pesar de que en la convocatoria de las pruebas de acceso se especificaba la reserva de un 3 por ciento de las plazas para aspirantes con una discapacidad física o psíquica igual o superior al 33 por ciento.

Fuentes de ese sindicato consultadas por Servimedia explicarn que la gerencia de la Universidad no contrató al trabajador, alegando que el reconocimiento médico había demostrado que su discapacidad le impedía ocupar un puesto en el que debía arrastrar material, concretamente mesas.

En su carta, Jaime Cedrún expresa su "perplejidad y preocupación" porque hechos de esta naturaleza se produzcan en una institución que por su condición de pública y educativa, "debiera dar ejemplo en el cumplimiento de las leyes".

CCOO recuerda finalmente que la Ley de Integracón Social del Minusválido (LISMI) contempla la reserva de un 2 por ciento de puestos de trabajo para lograr la integración laboral de los minusválidos.

Servimedia no ha conseguido obtener la versión de los responsables de la Universidad madrileña sobre esta información.