El equipo está compuesto de un emisor con un pequeño micrófono, que el profesor lleva sujeto a su ropa con una pinza o en un bolsillo, y un receptor, con un bucle que el estudiante lleva a modo de collar.

El dispositivo hace innecesario que el estudiante lea los labios del profesor para seguir la clase, lo que le permite tomr apuntes con normalidad. Al mismo tiempo, el docente tiene total facilitad de movimientos por el aula, sin las limitaciones que antes imponía la especial atención a alumnos con deficiencia auditiva. La utilidad de este equipo adquiere mayor relevancia en el aprendizaje de idiomas, ya que con la lectura labial es muy difícil porque el inglés hablado no se corresponde con su escritura.

La adquisición del equipo ha sido posible gracias a la colaboración institucional entre la Fundación Universitaria Comllas, la Unidad de Trabajo Social de la propia universidad y la Fundación ONCE. Esta última ha financiado en su totalidad el coste del equipo.

La Universidad Comillas tiene un programa de atención a estudiantes con discapacidad, para el que ha ido adquiriendo progresivamente recursos técnicos y materiales que permiten adaptar el entorno universitario a las necesidades especiales de estos alumnos, de manera que más allá de las deficiencias se potencien sus habilidades.

La universidad pone a disposción de sus alumnos material tiflotécnico de alta tecnología para ciegos (dos líneas y una impresora en Braille), un ordenador con caracteres aumentados y cuadernos de papel autocopiativo.

Este curso están matriculados en la universidad doce estudiantes discapacitados: cinco con deficiencia física, cuatro con deficiencia auditiva y tres con deficiencia visual. Estudian Derecho, Teología, Ciencias Empresariales Internacionales, Ingeniería Informática, Ingeniería Técnica en Informática de Gestión y Trabjo Social.