La marcha transcurrió de forma pacífica entre la Plaza de Colón y la sede del Ministerio de Educación, encabezada por una pancarta con el lema "Basta ya de ataques ala educación pública. La lucha contra la derecha continú".

Al frente de la protesta se situó un grupo de profesores y alumnos de la Escuela Superior de Arte Dramático, vestidos de negro y con las caras pintadas de blanco, que representaron varias escenas de rechazo a la LOU.

La secretaria general del Sindicato de Estudiantes, Miriam Municio, declaró que el pleno del Congreso aprobará mañana de manera definitiva "la LOU del Gobierno" "con los votos de los brazos de madera de los diputados del PP".

La portavoz estudiantil avisó al Ejecutivo de que las espadas siguen en alto" y que no piense que la batalla concluye con la ratificación mañana de la ley.

Municio lamentó que los sindicatos CCOO y UGT no se hayan animado a convocar una huelga general en la enseñanza aprovechando que el Gobierno ha resultado "débil y tocado" con el "rechazo mayoritario de los ciudadanos" a la reforma.

El secretario de Estado de Educación, Julio Iglesias de Ussel, afirmó que los manifestantes habían ejercido un derecho constitucional y el Gobierno no tiene nada qe objetar, aunque se felicitó de un seguimiento al que invitó a los periodistas que constataran desde una ventana del ministerio.