El "cash flow" generado fue de 2.559 millones de pesetas, y los ingresos por ventas aumentaron un 7,64 por cien, situándose en 13.802 millones de pesetas.

Además, los responsables de Unipapel informaron que en el balance de 1991 se incluirá una provisin de 270 millones de pesetas para cubrir la depreciación registrada durante el año pasado en su cartera de valores y cubrir las pérdidas acumuladas en las sociedades filiales del grupo.

En el pasado ejercicio, la empresa finalizó el Plan de Inversiones que inició en 1986, y que ha supuesto un desembolso de más de 10.000 millones de pesetas destinados a mejorar la eficacia de la gestión y los costes de producción, con el fin de afrontar el mercado único en buenas condiciones de competitividad.

Durnte 1991, Unipapel destinó a ese plan un total de 2.000 millones de pesetas, que sirvieron para financiar la compra de nueva maquinaria para la fabricación de sobres y bolsas y abrir una factoría en Aduna (Guipúzcoa) dedicada a la elaboración de material de archivo y oficina.

Para el presente ejercicio, la dirección de Unipapel prevé una sensible reducción de sus necesidades financieras, "ya que las inversiones quedarán reducidas simplemente a la reposición de maquinaria e instalaciones, cuyo importe uede similar a la previsión anual de amortizaciones".

Además, el grupo tiene previsto gastar otros 500 millones de pesetas en modernizar la gestión de la compañía mediante el cambio de los sistemas informáticos que emplea actualmente.

Entre las estrategias de la empresa para los próximos meses figura el desarrollo de un programa de concentración de "stocks" en pocos almacenes apoyado por un sistema de reparto que garantice las entregas de pedidos a los clientes en un plazo máximo de 24 horas.

Respecto a las estrategias comerciales para 1991, Unipapel potenciará su red de ventas en todo el territorio nacional, así como las dos filiales que acaba de constituir en Andorra y Portugal, para veder en esas zonas sus productos.