El pacto electoral se lleva a cabo días después de que se hicieran públicos los resultados de diversos sondeos en los que la intención de voto refleja que ninguna de las dos formaciones obtendrían representación en las instituciones valencianas.

Representantes de ambos partidos destacaron, sin emargo, que sus pretensiones "apuntan a conseguir el 15% de los votos en las autonómicas y ser la opción clave para poder gobernar la Generalitat".

El candidato del PP a la Generalitat Valenciana, Eduardo Zaplana, indicó recientemente a Servimedia estar convencido de obtener mayoría absoluta para gobernar en solitario, y que en caso contrario "no me queda otra opción que pactar con Unión Valenciana, siempre y cuando obtenga el mínimo del 5% de los votos".