En una nota de prensa, Unión Romaní califica d "absurda" y "gratuita" esta sentencia, y afirma que agotará todas las vías jurídicas españolas, sin renunciar a los tribunales internacionales si es preciso, para dejar sin validez la sentencia.

A su juicio, este fallo "es una agresión formal a la cultura, la historia, las costumbres y tradiciones de más de 600.000 gitanos españoles y más de 12 millones que viven en Europa".

Unión Romaní recuerda que su presidente, Juan de Dios Ramírez-Heredia, fue diputado en el Congreso, donde presentó una iniiativa parlamentaria con el fin de lograr el reconocimiento formal, por parte de los poderes públicos, de la boda gitana. La iniciativa fue admitida a trámite.

Asimismo, recuerda que tan sólo con el texto de esa iniciativa parlamentaria los tribunales militares españoles dispensaron de hacer el servicio militar a jóvenes gitanos que, siendo padres de algún hijo, acreditaron estar casos por el rito gitano.

Unión Romaní lamenta "profundamente" la decisión tomada por el TSJC, "tan alejada de la realdad social de los tiempos que corren. Una vez más, por desgracia para nosotros, los magistrados de un alto tribunal catalán se han comportado como aquellos legalistas que conocen las leyes, pero no saben interpretarlas ni aplicarlas".