La denuncia la realizó la denominada Plataforma Antifango, ante la aparición en el puerto de San Esteban de lodos y fangos procedentes de los vertidos que las industrias de las omarcas mineras realizaban al río Nalón, que desemboca en esa localidad.

A pesar de las protestas y actos reivindicativos, entre los que se encuentra la petición de los vecinos de que el municipio pasase a formar parte de la Comunidad de Madrid, ante la incomprensión de la Administración asturiana, nadie se hizo eco de ellas, con lo que la plataforma decidió enviar unas muestras de fango a la Universidad de Oviedo, donde fue analizada por el departamento de la Facultad de Químicas.

En el análisisse determinó que dicha muestra contenía grandes dosis de sustancias altamente tóxicas. La Plataforma envió los resultados al Parlamento Europeo pero ante la lentitud de su tramitación y la falta de respuesta del gobierno asturiano decidió disolverse hace dos años.

Posteriormente, durante el gobierno de Juan Luis Rodríguez Vigil se anunció un macro proyecto para potenciar la zona de la ría de San Esteban denominado "Puerto Norte", que convertiría el actual puerto en un área recreativa con un puerto deprtivo y un complejo turístico.

Sin embargo, la dimisión de Vigil, a causa del popularmente conocido como el caso del "petromocho" y la entrada en el gobierno de Antonio Trevín hizo que tal proyecto quedase aparcado, con lo que las esperanzas de los vecinos de ver desaparecer los lodos se vinieron abajo.

Ahora la Unión Europea podría multar a España por esta infracción, junto con otras cometidas en otros puntos de la gegrafía española, según una comunicación que un ex miembro de la plataforma reciió la pasada semana.