La iniciativa sería de carácter orgánico, puesto que modificaría la Ley del Régimen Electoral General (Loreg), que también lo es. En concreto, aportaría una nueva redacción a su artículo 127.2., que otorgaría al Estado la responsabilidad de financiar las campañas electorales.

El texto recogería: “El Estado concederá adelantos de las subvenciones mencionadas a los partidos, federaciones y coaliciones que las hubieran obtenido en las últimas elecciones a las Cortes Generales, al Parlamento Europeo o, en su caso, en las últimas elecciones municipales (…). La cantidad adelantada no podrá exceder del 30 50 por ciento de la subvención percibida por el mismo partido, federación, asociación o coalición en las últimas elecciones equivalentes”.

Modificando el artículo siguiente, el 128, la proposición prohibiría rotundamente otra posibilidad de financiación. Por ejemplo, por “cualquier administración o corporación pública, organismo autónomo o Entidad Paraestatal, de las empresas del sector público cuya titularidad corresponde al Estado, a las comunidades autónomas, a las provincias o a los municipios y de las empresas de económica mixta, así como de las empresas que, mediante contrato vigente, prestan servicios o realizan suministros u obras para alguna de las administraciones públicas”.

'MAILING'

También quedaría “igualmente prohibida la aportación a estas cuentas electorales de fondos procedentes de cualesquiera entidades de crédito, bancos, cajas de ahorro, cooperativas de crédito o del Instituto de Crédito Oficial”, así como de “fondos derivados de préstamos provenientes de personas físicas y jurídicas”, si conllevan una contraprestación o interés, aunque no si son gratis. Finalmente, se mantendría la prohibición de aportaciones de personas o entidades extranjeras.

Por otra parte, la proposición de Unidas Podemos modificaría los artículos 175 y 225 de la Loreg, que pasaría a establecer que “el Estado se encargará de hacer el envío directo a los electores de cada circunscripción electoral de un sobre con las papeletas de todas las candidaturas presentadas”. Ya no sería, por tanto, cada partido o candidatura la que hiciera llegar su propia papeleta, lo que permitiría reducir los envíos del llamado ‘mailing’.

El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, justificó en rueda de prensa la iniciativa interpretando que “quien paga manda”, y que por esta financiación bancaria “no es casualidad que sea tan difícil recuperar el rescate bancario y topar las hipotecas”. A su modo de ver, “tiene que ver con una relación demasiado estrecha entre las formaciones políticas y la banca”, unidas por estos créditos bancarios.

Echenique pidió el apoyo al resto de grupos políticos a la iniciativa, aunque dijo que en el suyo son “conscientes de que es difícil”, porque UP está “tocando un elemento del meollo del poder en España”. En cuanto al 'mailing', enjuició que “en pleno siglo XXI no es lógico” mantener esta práctica, salvo en los comicios municipales, debido a la multiplicidad de candidaturas.