En esta unidad se atiende la lesión medular tanto en su aspecto vital como en el funcional, con el fin de que los pacientes consigan el mayor grado de independencia según el tipo de disfunción de cada uno de ellos.

Para ello, se realizan ejercicios físicos en el gimnasio de rehabilitación del centro y se les ofrece asesoramiento en la unidad de terapia ocupacional, donde se realizan prácticas de actividades de vida diaria en un espacio que reroduce una vivienda convencional para lograr que el paciente pueda realizar con la mayor autonomía posible las tareas domésticas o pasar de la silla de ruedas a la cama, la bañera o el lavabo.

Aunque la frecuencia de la lesión medular es variable a lo largo del año, es en esta época cuando aumentan notablemente las originadas por causa traumática. Esto se debe a que, con ocasión de los múltiples desplazamientos vacacionales, se produce un mayor número de lesiones vertebromedulares debidas a los accidetes de tráfico o a los accidentes por zambullida en las piscinas o en la playa. Este tipo de accidentes suele ocasionar lesiones de tetraplejia y paraplejia, que obligan a que se dependa de una silla de ruedas para toda la vida.

Para evitarlo, el equipo médico de la Unidad de Lesionados Medulares de La Fe aconseja extremar las precauciones respecto a unas medidas primarias: observar rigurosamente las normas de tráfico (controlar la velocidad, emplear los cinturones y cascos de seguridad, evitar el excso de carga de los vehículos, respetar las señalizaciones y efectuar descansos cada 200-300 kilómetros, etc.) y evitar toda inmersión de cabeza en aguas poco profundas o desconocidas.

Además, el equipo médico de la Unidad de Lesionados Medulares, junto con ASPAYM (Asociación de Parapléjicos y Grandes Minusválidos) y dentro de una campaña de prevención de las secuelas graves de los accidentes de tráfico patrocinada por la Consejería de Sanidad y el INTRAS (Instituto de Tráfico), se ha desplazado a numeosos colegios e institutos de toda la Comunidad Valenciana para impartir charlas informativas con el objetivo de evitar en todo lo posible las consecuencias fatales de estos accidentes.

SEGURIDAD INFANTIL

Uno de los colectivos más proclives a padecer este tipo de lesiones son los niños, especialmente en accidentes de coche. España es el país con mayor índice de mortalidad y lesiones infantiles en accidentes de circulación.

Según estudios realizados en Suecia y Gran Bretaña, el 75 por ciento de os fallecidos y el 90 por ciento de los heridos se podrían haber evitado con el uso de un dispositivo de seguridad infantil.

Por este motivo se recomienda a los padres que empleen de forma correcta y sistemática los diferentes dispositivos de seguridad infantil dentro del automóvil, como cucos, sillitas o cojines elevadores.

Se ha de elegir el sistema o dispositivo en función del peso y el tamaño del niño, no por la edad. Además, se debe comprar un dispositivo homologado y colocarlo y utilizarlo orrectamente, según establecen las instrucciones.

Es recomendable que los niños menores de cuatro años utilicen dispositivos de seguridad colocados en posición contraria al sentido de la marcha para evitar lesiones en la parte superior del cuerpo, ya que si va en sentido de la marcha la cabeza quedaría sin apenas sujeción.

La poca musculatura cervical de los menores junto con el desproporcionado peso de su cabeza respecto al cuerpo explica el gran número de lesiones cervicales cuando se producen hoques frontales. Se ha demostrado que en esta posición se reduce hasta un 90 por ciento el riesgo de lesiones. Ahora bien, si el coche dispone de air-bag en el asiento delantero se debe colocar siempre al niño en el asiento trasero.

La legislación establece que en el asiento delantero del vehículo sólo pueden viajar menores de 12 años en el caso de que utilicen dispositivos de seguridad infantil homologados. Asimismo, no se aconseja llevar al bebé en brazos, ya que, según estudios, el adulto no podráretenerlo si el accidente se produce circulando a más de 5 km/h.