Así lo subrayó durante una entrevista en TVE recogida por Servimedia, durante la que explicó que ya han salido de Ucrania dos millones de niños y niñas desde el comienzo de la invasión rusa el pasado 24 de febrero, cerca de la mitad de los ciudadanos que han abandonado el país por la guerra. A esos menores se unen los desplazados internos, que han tenido que huir de su hogar.

Para José María Vera, el menor que sale de ese país “es indispensable que tenga acceso a un servicio de salud mental y de apoyo psicosocial urgente” y en unas condiciones” de interculturalidad y de cercanía a su situación”, e igualmente debería hacerse así en la propia Ucrania, donde Unicef trata de atenderlos pese a las dificultades que ponen las tropas rusas.

Por otra parte, y ante el hecho de que hay muchas familias que han manifestado su voluntad de acoger a refugiados ucranianos, Vera consideró que “ha sido un aspecto absolutamente positivo”, y subrayó que “hace falta agradecer esta solidaridad que se ha producido aquí, en España, y en otros países europeos”. Y subrayó que “ha sido clave la directiva europea para la protección temporal” junto a la “rapidez para asegurar la asistencia sanitaria, el acceso educativo, la acogida”.

OTRAS GUERRAS

En opinión del director Ejecutivo de Unicef en España “ojalá fuera así también para otros menores que huyen de otros conflictos en el mundo entero”, ya que, afirmó, el protocolo aplicado con los refugiados ucranianos “claramente es un buen ejemplo de que, cuando se quiere, cuando se tiene esa fuerte voluntad, tanto pública como desde la sociedad civil” tenemos “esa capacidad para la solidaridad”.

Una solidaridad que, destacó, “hace falta organizarla y hace falta que se haga dentro de los cauces oficiales” debido a los riesgos “de que se produzca trata, explotación y adopciones fuera de la de la institucionalidad”. El peligro es “que no tenga en cuenta el interés superior que cada menor tiene” y el de sus propias familias. Por ello, subrayó, “todo tiene que ser por cauce oficial” y con respecto a la acogida por familias “es muy importante planteárselo bien, refrenar ese primer deseo solidario, darle una reflexión honda” y después asegurarse de “que se va por unos canales lo más institucionalizados posibles”.

“Ahora ya se han estado estableciendo” esos canales oficiales, destacó Vera, que admitió que en las primeras semanas “hubo una espontaneidad mayor, que también tenía unos riesgos mayores”. En España, aseveró, “se está ya fortaleciendo el sistema de acogida, el sistema de protección”, pero todavía “quedan retos en la identificación de todos los menores”, de una forma especial “aquellos que han salido con adultos, que no viajan solos, pero que esos adultos no son su tutor legal” y que por lo tanto “hace falta indagar más y hacer un ejercicio muy fino”.

Finalmente, el responsable de la agencia de la ONU para la infancia aconsejó a “toda persona que esté cerca de la infancia de Ucrania” y especialmente cuando sean menores “que no están con su madre o con su padre” tiene que estar “muy próximo también a las autoridades públicas, para tener la mayor seguridad de que se canaliza de una forma adecuada y de una forma legal”.