El llamamiento para 2004 se ciñe a 21 crisis regionales específicas que requieren una respuesta coordinada, como el hambre y la pandemia del sida que afectan a amplias zonas de Africa Meridional.

"Escuchar las voces" es el lema del llamamiento, centrado en las necesidades de los niños, las niñas y las familias que intenan sobrevivir en situaciones de emergencia naturales o causadas por el ser humano.

"Los niños y las niñas son siempre las personas más vulnerables en situaciones de emergencia. Muchos de ellos mueren en épocas de guerra como consecuencia del conflicto: desnutrición, enfermedades, falta de refugio, falta de acceso al agua potable o saneamiento", explica la agencia de la ONU para la Infancia.

Según Unicef, la atención a los niños es un elemento fundamental para el progreso humano, motivo que le llea a colaborar con otros aliados de todo el mundo para superar obstáculos como la pobreza, la violencia, la enfermedad y la discriminación.

"Quebrar el ciclo de la pobreza exige que los gobiernos, la sociedad civil y las familias inviertan en los derechos de la infancia", concluye la organización.