El Ayuntamiento, que subvencionó esta temporada al Baloncesto Granada con 150 millones de pesetas, quedará en posesión del equipo una vez descienda de categoría, como está previsto por los resultados de juego, en virtud de un acuerdo con su ctual dueño, el empresario José Antonio Murado.

Aunque descienda, el Club Baloncesto Granada seguirá estando en la liga de honor del baloncesto español y en manos municipales, con lo que el Ayuntamiento resuelve un problema de rentabilidad política y deportiva: aprovechar el recientemente inaugurado Palacio de los Deportes de la ciudad, según las fuentes consultadas.

FUSION

El gerente de la ACB, Eduardo Portela, es una de las personas más interesadas en que los dos equipos malagueños se fusione, ya que, de lo contrario, tendrían problemas para su reconversión en sociedades anónimas.

El propio Portela está actuando como mediador para el acuerdo entre Unicaja y Mayoral y estaría interesado personalmente en que la plaza de ACB siguiera en Andalucía.

En caso de terminar con éxito las dos negociaciones paralelas, la plaza que dejará el Granada en la primera división B sería cedida al equipo fusionado, que crearía un nuevo equipo en esta categoría para poseer una auténtica infraestructura declub.

El Ayuntamiento granadino no tendría que pagar más de 185 millones de pesetas, cantidad estipulada con José Antonio Murado el 24 de mayo de 1991 cuando firmó el contrato para que el C.B. Granada pasase a ser equipo municipal.

Las fuentes consultadas en Málaga indican que la plaza que quedará vacante será la del Unicaja, que tiene que superar una mayor cantidad de dinero para su conversión en sociedad anónima. El nombre del club que se baraja es el de "Unicaja Maristas", convirtiéndose la enidad ahorrista en patrocinador del nuevo club.

Unas declaraciones recientes de Eduardo Portela afirmaban que es preferible contar con un club fuerte, con aspiraciones a jugar en Europa, que tener dos equipos pasando apuros para permanecer en la ACB.