Así lo explicó a Servimedia el vicerrector de Centros Asociados de la UNED, Juan José Benito, en relación al informe de la Guardia Civil conocido este lunes, en el que se denuncian presuntas irregularidades en las carreras quereclusos etarras han cursado en la Universidad del País Vasco (UPV). Benito explicó que el centro asociado de Vergara tenía un convenio con la universidad vasca para enviar el material didáctico a las cárceles, un acuerdo que dejó de tener validez en 2003, tras la reforma en el Congreso de la Ley General Penitenciaria.

Estas modificación legal implicaba que la población penitenciaria sólo podría cursar estudios universitarios en aquellos centros que tuvieran un convenio con el Ministerio del Interior, requisito que entonces y en la actualidad sólo cumple la UNED. A este respecto, Benito añadió que el centro de Vergara remitía a las prisiones sobres de matrícula, material didáctico, libros o apuntes, y que "en ningún caso" tuvo acceso a expedientes, actas de notas o información propia de la universidad.

"Se habla de manipulación de expedientes, de notas y de actas, cuando el centro asociado de Vergara no ha tenido acceso a estos documentos nunca, porque es información interna de la universidad", aseveró.

En su opinión, las sospechas afectan a un proceso interno de la UPV que no afecta ni al centro asociado ni al profesorado de la UNED. "Los profesores de la UNED no tienen nada que ver con este programa y el papel del centro asociado no tenía nada que ver con manipulación de actas", concluyó.