En días anteriores los partidarios de la reforma reconocían su temor por lo ajustado de la votación, dada la composición del Senado y la abstención anunciada por Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), integrante del Grupo de la Entesa Catalana i de Progrés.

Se había rumoreado que el PSOE, igual que los demás partidos que respaldan la reforma, habían llamado a todos sus senadores a acudir al pleno de esta tarde para asegurar los votos.

Quevedo no quiso confirmar que la hubieran llamado y dejó claro ante los periodistas y compañeros que le preguntaban que pensaba acudir en todo caso "por amor propio" de senadora y porque puede viajar en el AVE.

Lo cierto es que muchos socialistas respiraron aliviados cuando la vieron aparecer, y el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la recibió en su despacho del Senado para agradecerle su presencia y desearle que todo salga bien la próxima semana, feche en la que tiene programado el parto.

Lali Quevedo bromeaba después al explicar a sus compañeros que su hijo, que se llamará Sergio, será "el niño de las reformas", porque antes de nacer habrá votado tres Estatutos, los de la Comunidad Valenciana y Cataluña en el Senado, y el de Andalucía en el Parlamento autonómico, donde su madre es diputada.