Según informó el Ministerio del Interior, la operación dirigida por el titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla con el apoyo de la Fiscalía, se inició a comienzos de año, cuando los investigadores detectaron la existencia de una organización criminal que pretendía introducir una gran cantidad de cocaína en la provincia de Sevilla, utilizando contenedores procedentes de Sudamérica.

Tras el análisis de la documentación aduanera, se supo de la llegada al puerto de Algeciras de dos contenedores cargados de ‘tarimas de madera’ con origen en Asunción (Paraguay). La mercancía iba a ser importada por una empresa radicada en la provincia de Sevilla, relacionada con la organización que ya se estaba investigando.

La ruta de los contenedores, que se inició en Paraguay, continuó por Argentina y Marruecos, hasta llegar al puerto de Algeciras, donde se descargó e inspeccionó. En el interior de uno de los contenedores, tras dos palés de madera, se encontró una especie de cofre que contenía 500 paquetes de cocaína, de un kilo aproximadamente cada uno.

ENTREGA CONTROLADA

Tras descubrir la droga, agentes de la Policía Nacional y funcionarios del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria en Sevilla, prepararon el seguimiento y entrega vigilada de los contenedores.

Días más tarde, el contenedor que transportaba la droga, siguiendo órdenes de la organización contrabandista, fue llevado hasta una nave situada en la localidad de Santiponce (Sevilla). En ese momento se detuvo a cuatro individuos, entre ellos el administrador de la sociedad importadora.

Posteriormente se realizaron seis entradas y registros en diferentes domicilios y naves en las localidades sevillanas de Santiponce, Camas, Valencina de la Concepción y Sevilla capital, hallándose en una de las localizaciones 808 kilos de picadura de tabaco, lo que desveló la existencia de dos empresas implicadas el contrabando de tabaco.

De esta manera, se puso de manifiesto la utilización del contrabando de tabaco para conseguir financiación para sufragar los costes de compra e introducción de la droga.

En una fase posterior, se efectuaron otros seis registros en diferentes domicilios y naves radicados en las localidades sevillanas de Gines, Mairena del Aljarafe, Camas y Palomares del Río, así como en Algeciras (Cádiz). También fueron detenidas otras seis personas relacionadas con las operaciones de tráfico de estupefacientes y contrabando de tabaco.