La detención se produjo después de que sobre las 4 de la pasada madrugada la menor, vestida con pijama y presa de la histeria, parase a un coche de la policía que patrullaba por la Avenida del Paralelo de Barcelona. Una vez tranquilizada, la joven aseguró a los agentes que su padre quería violarla.

Los funcionarios comprobaron que la niña presentba señales de violencia, por lo que fueron en busca del padre, a quien localizaron poco después también en la calle y vestido con pijama.

Padre e hija fueron posteriormente trasladados al Grupo de Menores de la Policía, donde se comprobó que la menor había sido objeto de abusos sexuales continuados.

La policía también descubrió que el padre, residente en Barcelona desde hace pocas semanas, posee numerosos antecedentes penales. La madre de la niña permanece en Uruguay.