"Salus", que nació hace cuatro años, es una oficina de la diócesis de Barcelona integrada por diez sacerdotes que se turnan para ofrecer el sacramento de la extrema unción a los moribundos de la ciudad condal.

"Los sacerdote", aseguraron las mismas fuentes, "realizan turnos de seis, ocho o diez horas y salen para atender el servicio en cuanto reciben la llamada de un familiar del enfermo".

El director de "Salus" es el sacerdote José Luis Fernández y la idea de crear este tipo de servicio telefónico nació con la escasez de vocaciones religiosas.

"Al disponer de menos sacerdotes", agregó el responsable del servicio, "era frecuente que las familias llamasen a las parroquias para solicitar los últimos sacramentos y no hbiese nadie".

Ahora, el familiar de cualquier barcelonés moribundo puede llamar al número 2020696 y recibirá en breves tiempo la visita del sacerdote "de guardia" en la ciudad condal.