El informe constata los hechos denunciados por los familiares de seis pacientes con discapacidad intelectual, que fallecieron mientras estaban ingresados en centros hospitalarios o poco después de haber recibido tratamiento.

Las denuncias, que han sido recopiladas por la organización para la ayuda a personas con discapacidad intelectual Mencap, fueron presentadas contra siete hospitales públicos y dos autoridades sanitarias locales, por la falta de adecuación de la asistencia a las necesidades de personas con esta discapacidad y la descoordinación entre los distintos servicios asistenciales.

Los autores de la investigación subrayan que los pacientes con discapacidad intelectual reciben un trato menos favorable que el resto, y que las reclamaciones presentadas por sus familias no son resueltas

Sin embargo, el defensor del paciente ha eximido de responsabilidad a los médicos de familia relacionados con los casos denunciados, lo que ha sido criticado por Mencap, aunque Mark Goldring, responsable de esta organización, considera que los hallazgos de la investigación serán útiles y contribuirán a mejorar la asistencia sanitaria que se presta a personas con discapacidad intelectual.

Por su parte Phil Hope, responsable ministerial de inspección sanitaria y discapacidad intelectual, ha subrayado "que las muertes evitables de pacientes con discapacidad intelectual son inaceptables, y, por lo tanto, se tomarán medidas para garantizar su igualdad de oportunidades en el acceso a la asistencia médica y los servicios sociales.