Este análisis sobre "el peligro de la extensión regional del conflicto en la región oriental de la República Democrática de Congo" está realizado por el experto Manuel de la Rocha.

En el informe, De la Rocha hace cinco recomendaciones para evitar que se extienda la situación violenta por la región africana.

La primera de ellas es la "ampliación" de los efectivos militares de la ONU (Monuc) en la zona porque, a su juicio, ello permitirá "una acción más enérgica" para desarmar y reintegrar a los militares en la sociedad civil congoleña.

Además, señala que "la UE también debe llevar a cabo una acción más enérgica" y ya que se ha rechazado el envío de una fuerza militar europea, queda abierta la posibilidad de una "contribución de tropas europeas reforzando a la propia Monuc" o el "envío de una fuerza menor para proteger un objetivo puntual como sería el aeropuerto de Goma".

Este análisis considera que "España ha hecho un esfuerzo notable respondiendo con rapidez a los llamamientos humanitarios de las Naciones Unidas para otorgar más ayuda de emergencia a los campos de refugiados en la región de los Kivis".

Pero destaca que "a más largo plazo es necesario que España tenga una presencia más visible, elevando el nivel de la interlocución política con el gobierno de la RDC y cooperando en la mejora a los servicios básicos, gobernabilidad democrática, reforzamiento de las instituciones y consolidación de la Paz - una vez que esta última se logre-", concluye.

Sin embargo, resalta que "a más largo plazo la única solución posible debe ser la política mediante el diálogo directo" entre las partes.