Baíllo lamentó que este nuevo suceso ponga en evidencia que las cerca de 70 filiales de Afinsa siguen operando con total impunidad, "sin que los administradores concursales, a día de hoy, hayan emprendido ninguna actuación para controlarlas".

"No se sabe por qué están regalando los sellos ni por orden de quién y los administradores concursales siguen sin hacer nada", dijo el letrado a Servimedia.

Para el abogado, se trata de algo "muy grave", ya que el dinero que podrían percibir los afectados se sigue escapando tal y como puede suceder también con el proceso contra Escala Group (la filial de Afinsa en EEUU), que ha sido denunciada por sus inversores.

Philagent, perteneciente al grupo Philagroup, también propiedad de Afinsa, no es la única filial que vende sellos. Según Baíllo, Afinsa Investimentos, en Oporto, también lo está haciendo, aunque en este caso lo hace por su valor facial.

En la vista abierta en Nueva York, los inversores estadounidenses de Escala Group reclaman a la sociedad filial de Afinsa una indemnización por la pérdida de valor de las acciones en el Nasdaq desde el momento de la intervención, reclamación que podría ascender a unos 176 millones de euros.

Además de esta cifra, en actuaciones judiciales de este tipo en EEUU los demandantes tienen derecho a cobrar multas multimillonarias como compensación a los daños sufridos, lo que junto a las costas del proceso, haría que la cantidad recibida por estos inversores fuera aún más importante.