El paquete llegó a la oficina de correos de Maspalomas, al Sur de Gran Canaria, un año después de partiese e Nueva York, según publica hoy el periódico Canarias 7. La familia esperaba un paquete con libros de su hijo, Raúl Boldú Turó, que estudió en Estados Unidos pero, en su lugar, se encontró con múltiples documentos en diferentes idiomas.

Correos ha levantado una acta de los sucedido y ha avisado al consulado norteamericano en Las Palmas de Gran Canaria para que investigue el caso y se haga cargo de la correspondencia. Se cree que el suceso se produjo por un cambio de etiquetas por parte de los funcionaios del servicio de correos de Estados Unidos.

La familia sólo abrió unos pocos sobres de los que traía la valija, que pesa veinte kilos, ya que en muchos documentos se advierte que su apertura constituye un delito castigado con multas.