En un principio, la empresa proyecta utilizar esta tecnología para generar la energía necesaria para el sistema de refrigeración de camiones frigoríficos, pero su objetivo es perfeccionarla para producir motores de combustión y vapor para vehículos híbridos.

Para ello, los ingenieros de esta compañía pretenden recuperar un 40% de la energía que se pierde a través del tubo de escape, que según estos expertos supone el 36% de la generada por un motor de gasolina o diesel.

"El vapor es una poderosa fuente de energía. Si puede mover una locomotora, ¿por qué no el motor de un coche?", aseguró Abdul Mitha, presidente de Clean Power Technologies.

"Nuestro objetivo es transformar el calor que desperdician muchas tecnologías para convertirlo en energía que nos permita ahorrar recursos", añadió Mitha.