Hasta hace unos años, las técnicas de reanimación y los cuidados intensivos en los hospitales no conseguían reducir de una forma apreciable los casos de muerte súbita. Pero una campaña iniciada en 1994 y prolongada hasta hoy ha conseguido reducir en más de la mitad las muertes de bebés.

La campaña se basa en el lema "Boca arriba para dormir, boca abajo para jugar", informa el diario "Le Monde". Además de acostar de espaldas al bebé, la campaña recomienda emplear un colchón duro, un edredón ligero y unca almohada o cojín.

Los estudios epidemiológicos previenen contra ciertas condiciones ambientales, como el humo del tabaco. Fumar durante y después del embarazo aumenta de 2 a 5 veces el riesgo de muerte súbita. Por otra parte, estos estudios aconsejan una temperatura ambiente de entre 18 y 21 grados centígrados y advierten a los padres que dormir con el bebé en la misma cama es peligroso.

Cuando están despiertos, los expertos recomiendan colocar a los bebés boca arriba. Esta posición favoreceel desarrollo de los músculos dorsales y de la nuca.