UNA DE CADA CUATRO CAJETILLAS DE TABACO RUBIO QUE SE VENDEN EN ESPAÑA SON DE CONTRABANDO, SEGUN TABACALERA

- El contrabando movió una cifra de negocio en nuestro país cercana a los 159.000 millones de pesetas en 1993

MADRID
SERVIMEDIA

Casi una de cada cuatro cajetillas de cigarrillos de tabaco rubio que se venden n España son de contrabando, según un informe sobre el contrabando de tabaco en el sur de Europa elaborado por Tabacalera, que indica que esta práctica ilícita movió en nuestro país una cifra de negocio cercana a los 159.000 millones en 1993.

El estudio, al que tuvo acceso Servimedia, analiza la situación del contrabando en España, Francia, Italia, Portugal y Grecia, que mantienen grandes afinidades en lo que se refiere al sector tabaquero, ya que en cuatro de ellos este sector se encuentra bajo régimn de monopolio, ya sea de hecho (Portugal) o de derecho (Francia, Italia y España).

El contrabando de cigarrillos, según el informe, es un problema arraigado y a resolver con urgencia en Italia y España, mientras en Francia y Grecia, aunque casi ha aparecido a partir de 1992, su creciente evolución exige adoptar medidas para combatirlo. En Portugal su presencia es aún insignificante, ya que la única empresa fabricante de tabaco existente domina el 95 por ciento del mercado y resulta más difícil la vena de marcas de contrabando.

De la evolución del contrabando de tabaco en los últimos cinco años se deduce que en Italia este fenómeno siempre tuvo mayor envergadura que en España, pero a partir de 1992 el contrabando de cigarrillos se duplica en España, llegando en 1993 a situarse en 650 millones de cajetillas, 50 millones más que en Italia.

Entre 1989 y 1993 la evolución del contrabando de tabaco en España ha sido desigual, pasando de algo menos de 400 millones de cajetillas en 1989 a 300 millons en 1990, poco más de 200 millones en 1991, 450 millones en 1992 y 650 millones de cajetillas el año pasado.

La valoración estimada de lo que supuso el contrabando de cigarrillos -a precios de venta al público- en 1993 en el sur de Europa se aproxima a los 380.000 millones de pesetas, destacando la cifra de negocio que movió en Italia (198.000 millones), seguida de España (159.000), Grecia (14.000) y Francia (7.500 millones).

De esta cifra, según el informe de Tabacalera, 260.000 millones de pestas hubieran sido ingresos para los estados (vía impuestos), y los 120.000 millones restantes se habrían repartido entre la industria manufacturera y el comercio mayorista y minorista.

ESPAÑA, LA PRIMERA

Respecto al peso que tiene el contrabando en el consumo total de cigarrillos rubios en estos cuatro países, oscila entre el 22,6 por ciento de España y el 0,8 por ciento de Francia. Así, en 1993, de los 2.876 millones de cajetillas de cigarrillos rubios consumidos en nuestro país, 650 millones fuero de contrabando.

Las marcas más afectadas por el contrabando en 1993 fueron Marlboro (43 por ciento), Winston (30 por ciento), Camel (6), otras marcas internacionales (17) y el 4 por ciento restante corresponde a marcas nacionales que son exportadas y vuelven a entrar en los países de origen sin pagar los impuestos correspondientes para ser vendidas ilegalmente.

Según el informe de Tabacalera, el canal de distribución del tabaco de contrabando más importante es la venta ambulante, aunque también uede comprarse en algunos bares, restaurantes, pubs y discotecas. El precio al que se vende este tabaco es bastante inferior al de sus marcas homologadas en el mercado legal, al contrario de lo que ocurría en España antes de 1992.

Tabacalera considera que, dada la evolución y la cada vez mayor importancia económica y social de este fenómeno, es imprescindible una mayor coordinación entre las autoridades comunitarias para frenar la comercialización ilegal del tabaco. En este sentido, acoge favorablemene algunas medidas adoptadas, como la etiqueta fiscal de las cajetillas de tabaco.

Según los datos de Tabacalera, el aumento del control y la represión del contrabando de tabaco ha permitido una subida de las ventas de cigarrillos en España del 5,4 por ciento durante el primer semestre del año. En ese período, los españoles fumaron 1.527,5 millones de cajetillas de cigarrillos, con un gasto total de 255.817 millones de pesetas.

(SERVIMEDIA)
17 Oct 1994
NLV