El trasvase de aguas desde la depuradora del Lérez hacia Sanxenxo, principal villa turística de Galicia, se realiza mediante una red de tubos de 90 cm de dámetro.

Según el concejal responsable de aguas, Germán de la Iglesia, esta red soporta una presión superior a la que puede aguantar la red radial de distribución de Pontevedra, en parte construida hace más de 50 años. Estas mismas fuentes indicaron que la Consejería de Pbras Públicas había sido advertida de los riesgos que comportaría la mayor presión derivada de la puesta en marcha del abastecimiento de Sanxenxo.

El Ayuntamiento recomendó que quienes disponen de agua que la hierban antes de consmirla. Hasta media tarde no quedarán resueltas todas las averías, aunque por el momento se emplean redes secundarias para que buena parte de la población tenga suministro.