En el libro, editado por Planeta, un declarado amigo y admirador de la obra de Cela como Umbral vierte epítetos envenedados del escritor gallego y revela varias "perlas" de su trayectoria literaria y vital.

Se refiere a él como un mal articulista, pone en entredicho su capacidad como constructor de argumentos narrativos y le acusa incluso de haberle copiado proyectos como el "diccionario de tacos".

Marina Castañono sale tampoco bien parada en el libro. Narra de ella diversas anécdotas en las que a menudo aparece como telón de fondo un desmedido entusiasmo por el lujo y el dinero.

RICOS Y POBRES

Hoy, Umbral se mostró mucho más contemporizador y los elogios hacia Cela aparecieron más que las críticas. Destacó su admiración por obras como "La colmena" y "La familia de Pascual Duarte" y su aportación a la renovación del castellano, además de ser un hombre que "contagiaba y comunicaba vitalidad".

Admitió qu la biografía no es complaciente y que se refiere al Nobel, por ejemplo, como un mal articulista, pero dijo que este reproche se lo trasladó en vida a Cela, por lo que no cree que se le pueda tachar ahora de "cobarde" por hacer unos comentarios públicos contra alguien fallecido.

"Le dije cosas fuertes. Le decía las cosas con naturalidad y nunca le tuve miedo, porque Cela no pegaba bofetadas a la gente como se cuenta", subrayó Umbral, quien garantizó que se habría jugado su amistad con el Nobel por pubicar la biografía en términos similares a los que ha aparecido: "Cela no me daba nada. A veces me invitaba a cenar, como hacen los ricos con los pobres".

Respecto a Marina Castaño, comentó que para escribir sobre la vida de Cela estaba obligado a hablar de sus mujeres. A Rosario Conde la definió como una "gran matriarca" dotada de una enorme personalidad y carácter, mientras a Castaño la conceptuó de "ninfa con todo el encanto de la juventud" "a la que se agarra un fauno viejo".

Ante las reiterads preguntas sobre los comentarios críticos que hace en el libro hacia la segunda esposa de Cela, el autor de "Mortal y rosa" mostró su deseo de eludir este aspecto de la vida de Cela y se lamentó de que la presentación de la biografía corriera el peligro de parecerse al programa de cotilleo "Tómbola".

Explicó que Castaño no le ha llamado para quejarse por el libro a pesar de que lo ha hecho ante los medios de comunicación, donde ha tildado el libro de "frívolo" y "superficial".

Umbral tuvo inclus palabras de elogio para la viuda en su faceta de escritora, al revelar que una vez leyó unos cuentos suyos y le parecieron correctos, pero luego Cela le aconsejó a su mujer que los transformara en novela para tener una mejor acogida en el mercado editorial y al final se estropeó el producto.

El articulista de "El Mundo" rechazó que la publicación del libro sea oportunista. Aseguró que lo tenía escrito antes del fallecimiento de Cela y que el propio escritor conocía su existencia. "Cuando se me muere l protagonista, consulto con la editorial y le parece oportuno sacar el libro cerca de la desaparicióndel protagonista", afirmó.

En cualquier caso, dijo que Cela lo habría leído, se habría interesado por el análisis literario, aburrido con las referencias a lo que hizo en su vida y habría "puntualizado" lo que hubiese estimado procedente sobre su segunda esposa.

Umbral catalogópolíticamente a Cela como "anarquista de derechas", en línea con la definición que recordó que hizo de él un crítico rancés, y se mostró seguro de que jamás tuvo un "negro" porque nunca hubiera pagado por este servicio.