Así se manifestó el sindicato ante el dato adelantado de IPC correspondiente al mes de marzo que, según el Instituto Nacional de Estadística, se sitúa en el 9,8%, la cifra más alta desde 1985.

Ante este escenario, UGT también pidió actuar ya sobre el sistema de formación de precios del sector eléctrico, “de manera que los precios medios resultantes del MWh para el consumidor final se sitúen en niveles equivalentes a los anteriores al verano de 2021, cuando empezaron a desbocarse como consecuencia de los movimientos especulativos de almacenamiento de gas de Rusia, que sin duda preparaba ya la agresión”.

“Esta situación requiere actuar con una política efectiva de contención de precios puesto que, según los escenarios más favorables, la tasa anual media que se estima para 2022 sería de un 5,9%, mientras que bajo los supuestos más realistas sería del 6,8%. Valores que estarían muy lejos de los que se vaticinaban antes del inicio de la guerra”, alertó UGT.