En una nota de prensa, UPTA-UGT considera las ayudas aprobadas por el Ejecutivo como una "simple deducción de impuestos" que no tiene entidad para afrontar los problemas que se avecinan.

Además, UGT conidera que generalizar el concepto de pyme en un país en el que el 95% de las empresas tienen menos de cinco asalariados "sólo puede tener por objetivo trasladar el incentivo fiscal al otro 5%, es decir, a las grandes empresas y sus grupos de referencia financieros".

En opinión de UGT, es un "escarnio" para los dos millones de autónomos que son empresarios individuales que se considere una empresa de reducida dimensión a aquella que factura algo menos de cinco millones de euros al año, y se trata de un "excusa" más para dejar sin apoyo y protección al sector de emprendedores "más débil y necesitado".