El sindicato considera que este incremento en la inversión en formación es posible, teniendo en cuenta los beneficios con los que la entidad financiera cerró el pasado ejercicio.

Además, reclama que los cursos se desarrollen en horario laboral. Para el sindicato, la negativa de la entidad a que los trabajadores puedan elegir un día de libranza por cada seis horas de cursos "desincentiva a los trabajadores a acudir a cursos fuera de la jornada de trabajo".

UGT demanda también que la inversión en formación "se distribuya de forma equitativa entre los 20.500 trabajadores que componen el SCH". "Queremos que la formación llegue a todos los grupos y categorías con la misma intensidad", afirma el sindicato.