La propuesta está recogida en la propuesta de programa de acción que el sindicato ha elaborado ante el 39 Congreso Confederal, que se celebrará entre el 1 y el 4 de junio próximos, documento sobre el que caben enmiendas.

En el texto, al que ha tenido acceso Servimedia, UGT afirma que la subida de los precios de los pisos "acaba produciendo un efecto expulsión de las capas sociales más desfavorecidas, pero también una enorme caída de los níveles de renta y de vida en aquellas capas medias de la población que se encuentran en una situación económica más desahogada".

A juicio del sindicato, la vivienda "se ha convertido en España en un negocio meramente especulativo" alentado por los bajos tipos de interés y la baja rentabilidad de otras formas de inversión.

MEDIDAS

Ante esta situación, UGT reclama la puesta en marcha una serie de medidas para "apoyar la intervención activa y directa", de forma que la política de vivienda bascule sobre una mayor promoción de pisos "como único mecanismo capaz de solucionar los problemas actuales".

En el ámbito de los pisos en propiedad, UGT quiere "reducir al mínimo las medidas fiscales y sustituir por actuaciones e intervenciones directas"; una política de subvenciones "sólo para casos especiales (combinadas con precio tasado o protección oficial, es decir, la intervención en el precio".

También propone establecer la reserva de suelo público para la promoción de vivienda protegida en todo el proceso de calificación; exigir un mayor control de la calidad de la edificación; y realizar campañas de divulgación e informativas sobre los derechos y obligaciones del que adquiere una vivienda.

ALQUILER

En cuanto al alquiler, UGT reclama "eliminar las medidas fiscales, por regresivas y porque finalmente acaban por encarecer los alquileres, al trasladarse al precio". "Las subvenciones", sostiene el sindicato, "si no se combinan con intervenciones en el precio sólo sirven para encarecer los alquileres".

La reserva de suelo público también debe servir para promover viviendas en alquiler para ayudar a conseguir el objetivo, similar a la media europea, de que el 30% de los pisos construidos cada año se destinen al arrendamiento, lo que supondría multiplicar casi por tres el nivel actual.

UGT incide en la necesidad de "restablecer una política de vivienda pública en alquiler muy amplia que, discriminando en función de las necesidades de los colectivos que acceden a la vivienda, fije como objetivo, en los cuatro años de duración del plan, que el 50% de las viviendas en alquiler correspondan a alquiler social".

No se olvida el sindicato de la rehabilitación de pisos y pide luchar contra las infraviviendas, promover la modernización del parque más antiguo y potenciar las ayudas para la rehabilitación, en función de la renta del propietario.

La concertación entre el Gobierno central y las comunidades autónomas es necesaria, concluye el sindicato, para lograr la puesta en marcha de una política potente de vivienda.