En su opinión, este sistema "no es la solución", por lo que se deben tomar las medidas previstas en el Plan Nacional de Acción sobre Siniestralidad Laboral. Reivindica, por tanto, la apertura de negociaciones para redactar una propuesta que apueste por la implantación de la cultura preventiva en las empresas.

Esta central asegura que el Gobierno "ha vuelto a caer en el tópico de esperar a que se registre el accidente, en vez de premiar la adopción de medias eficaces para que éste no se produzca".

También critica el hecho de que las empresas se puedan beneficar de una reducción en su cotización sólo si no provocan accidentes laborales, "aunque utilice productos que perjudican a sus trabajadores y cuyos efectos nocivos sólo se verán a largo plazo".

Para UGT, la propuesta presentada tiene a favorecer a las mutuas de accidentes, ya que establece una "cotización a la carta" con tarifas preferentes según la actividad, como seguros privados, y sólo utilza como referencia los accidentes con baja en caso de que se deba reducir o aumentar la cuota.

Defendió, por último, la adecuación y la simplificación de estas tarifas (establecidas hace 20 años), así como incluir un capítulo relativo a la prevención de riesgos en la subcontratación.