Marisa Rufino, secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT-Madrid, aseguró que las sequías cíclicas por el avance de la desertificación no sólo responden a la subida del consumo de agua debido a una población en aumento. "Desde el año 2000 al 2005, el incremento en el consumo (+13,8%) es superior al incremento poblacional (+10,1%)", dijo.

"El nuevo urbanismo horizontal predominante en buena parte de la Comunidad, las viviendas bajas con jardín mucho más demandantes de agua que los pisos, así como el incremento de las piscinas en las urbanizaciones están detrás de este incremento del consumo de agua", explicó Marisa Rufino.

Rufino afirmó que, con una adecuada gestión del agua en la Comunidad de Madrid, "no tendríamos una tan elevada dependencia de las precipitaciones y del trasvase de agua".

Por otra parte, Rufino insistió en que es vital conocer y tratar mejor nuestras reservas subterráneas, con especial énfasis en acabar con las extracciones ilegales y los usos no prioritarios. "Tenemos que potenciar el uso de agua reciclada", dijo.

Asimismo, el sindicato asegura que en este año el abastecimiento de agua está garantizado pero que, "aunque este año podamos pasarlo sin cortes de agua a poblaciones, no nos encontramos en una situación para ser optimistas porque no sabemos como se comportarán las lluvias de primavera y otoño".

Por lo tanto, el sindicato expone una serie de medidas para no llegar a una situación de crisis. Respecto al creciente consumo de agua, "hay que intentar reducir la tendencia del consumo per cápita y mantenerla como si siempre fueran periodos de sequía, realizando campañas de sensibilización continua, ya que la ciudadanía responde bastante bien ante estas situaciones", dijo Rufino.

Respecto a la búsqueda de recursos, el sindicato propone reutilizar la totalidad del agua vertida en la Comunidad. "Así se cubriría la demanda que Madrid solicita de la Confederación Hidrográfica del Tajo", indicó. Además propone controlar el crecimiento urbanístico, especialmente el de viviendas unifamiliares.

Al sindicato le llama la atención que el Canal de Isabel II no recoja una partida presupuestaria destinada a la investigación y desarrollo (I+D+i). "Destina sus recursos a otras actividades que no se encuentran muy relacionadas con el agua, siendo evidente la necesidad de realizar estudios sobre el estado de los pantanos", denunció Rufino.

"La solución no es la construcción de pantanos y embalses porque, si no llueve, ¿para que queremos espacios para almacenar agua?", se preguntó Rufino, que reclamó una política global del agua y no "diferentes políticas dispersas".

El sindicato denunció que "el Gobierno autonómico tiene que dejar de utilizar a los ciudadanos como arma arrojadiza contra el Gobierno central y dedicar sus esfuerzos a solucionar nuestros problemas".