"Madrid no puede seguir siendo la región con menor número de solicitudes, con tan sólo 12.853 presentadas frente a la estimación prevista de 20.000 personas mayores que podrían considerarse grandes dependientes, además de las personas con discapacidad, que mayoritariamente se encuentran en edades comprendidas entre los 25 y 44 años", denuncia el citado sindicato en un comunicado.

UGT asegura también que aún no se ha contratado al personal necesario para evaluar a todas las personas que necesitan del baremo para tener acceso a los servicios y prestaciones que garantiza la ley estatal de mínimos.

Hasta el momento, dice, sólo se ha creado una Dirección General y se ha contratado un equipo de 66 trabajadores sociales para la valoración y baremación de las solicitudes, medidas que, a su juicio, son "claramente insuficientes", pues según sus estimaciones son necesarios entre 50.000 y 52.000 profesionales.

Ante esta situación, UGT-Madrid asegura que seguirá demandando un cambio en estas políticas públicas y la negociación y aprobación de un Plan regional de Atención a las Personas Mayores.

En este plan, señala, debe aparecer la creación de plazas residenciales públicas de gestión directa orientada a eliminar las listas de espera, el incremento y la ampliación de la cobertura de recursos alternativos (centros de día, atención domiciliaria, pisos tutelados y teleasistencia).

Del mismo modo, el plan ha de recoger iniciativas que permitan que la persona mayor se mantenga en su entorno habitual y que garanticen una serie de servicios integrales tanto para las personas que se valen por sí mismas como para las que necesitan algún tipo de asistencia.