A este respecto, un portavoz de Retevisión informó a Servimedia de que aún no se ha tomado una decisión definitiva sobre el supuesto cambio de ubicación de la compañía.

Según UGT, el traslado de la sede a Barcelona no estaba previsto en los pliegos de condiciones para la adjudicación del concurso de privatización de Retevisión, por lo que "una vez más se nos engaña a los sindicatos, y por ende a los trabajadores".

La central sindical considera que esta decisión es puramente olítica, ya que perjudicaría, tanto en el plano social como en el económico, a la compañía. Por ello, añade que si el traslado se lleva a cabo la dirección de la empresa sólo pretendería hacer un favor a Convergencia i Unió (CiU).

"Los señores del PP, con tal de mantener sus poltronas, son capaces de hipotecar el futuro de una empresa llamada a ser el segundo operador global de telecomunicaciones de España, perjudicando así a los intereses nacionales", según UGT.