UGT argumenta que con esta medida sólo puede regularizarse la situación de aquellos trabajadores extranjeros que hayan tenido en alguna ocasión permiso de trabajo o de residencia, o bien lo hayan pedido, por lo que "una gran parte de los inmigrantes van a segur en condiciones de marginación e irregularidad".

El sindicato, que aboga por el empleo estable y con derechos para todos los trabajadores, independientemente de su raza, nacionalidad o procedencia, señaló que su Centro de Información a Inmigrantes de Madrid ha atendido en dos días a 250 personas, debido la expectativa que ha levantado dicho proceso de legalización.