En España, la convocatoria se extiende a unos 55.000 empleados de Renfe, los trenes de vía estrecha de Feve y los ferrocarriles que gestionan las comunidades autónomas de Cataluña, Valencia y el País Vasco.

La huelga será secundada también en Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Francia, Gran Bretaña, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Holanda, Portugal y Suiza.

El paro ha sido convocado en una "hora valle" para no causar perturbaciones a los usuarios, ya que sólo pretende er una llamada de protesta contra los planes de reducción del ferrocarril a nivel europeo, según explicaron hoy en rueda de prensa los dirigentes de las Federaciones del Transporte de UGT, Juan Florencio López, y de CCOO, Javier Cubillo.

Fuentes de Renfe consultadas por Servimedia señalaron que un paro de una sola hora de duración no precisa de la aplicación de servicios mínimos porque los trenes de largo recorrido no dejan de salir y las horas punta del servicio de cercanías van de 6 a 9 de la mañanay de 6 a 9 de la noche.

Cubillo criticó a Renfe por reducir sus inversiones en el ferrocarril, que en 1993 ascenderán a 191.000 millones de pesetas, casi lo mismo que este año, pero que en el 94 disminuirán hasta 150.000 millones y en el 96 serán ya de 110.000.

A su juicio, el coste del ferrocarril en España no es alto, ya que supone el 0,3 por ciento del PIB anual, frente al 1 por cien de la media europea.

Los dirigentes sindicales de UGT y CCOO señalaron que el rendimiento del ferrocarril o debe interpretarse sólo en términos económicos, ya que su reducción conduciría a desviar parte del tráfico de mercancias hacia las carreteras, lo que aumentaría los atascos.