UGT Y CCOO SEGUIRAN CON LAS MOVILIZACIONES, PESE AL INICIO DEL DIALOGO CON EL GOBIERNO

MADRID
SERVIMEDIA

Los sindicatos UGT y CCOO continuarán con su campaña de movilizaciones en favor del empleo y por la reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales, pese al inicio de negociaciones con el Gobierno, según dejaron claro hoy los secretarios de Ación Sindical, Toni Ferrer y Fernando Puig, respectivamente.

Ferrer y Puig, que participaron hoy en unas jornadas sobre "El nuevo Plan de Empleo y valoración de un año de reforma laboral", organizadas en Madrid por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), indicaron que el diálogo social está en una situación de "compás de espera, lo que da perfectamente sentido a la movilización".

Los sindicatos no esperan mucho de la reunión, en principio tripartita, que el ministro de Trabajo, Javie Arenas, mantendrá con los líderes de CCOO, Antonio Gutiérrez, y UGT, Cándido Méndez, y con el presidente de la CEOE, José María Cuevas, y creen que las movilizaciones son necesarias para exigir "una verdadera negociación a patronal y empresarios".

CCOO y UGT han convocado una asamblea de delegados en Madrid para el próximo día 16 de junio, que, según Ferrer y Puig, será "la antesala del inicio de asambleas en todos los sectores y empresas", para exigir una negociación sobre los temas pendientes de lareforma laboral, el Plan de Empleo, la reducción de jornada y la mejora de la protección social a los parados.

Ferrer considera que no tiene sentido abrir un diálogo tripartito entre Gobierno, sindicatos y empresarios, cuando ni siquiera hay acuerdo en los temas que discuten CCOO y UGT con la CEOE, y anunció que los sindicatos pedirán formalmente al Gobierno una reunión bilateral para hacer un guión de materias a negociar y "ver cómo reorientamos el diálogo social".

A juicio de los responsables sndicales, hay aspectos que deben negociar bilateralmente Gobierno y sindicatos, como lo derivado del Acuerdo de Pensiones, el aumento de la cobertura de desempleo, algunos asuntos de la reordenación del tiempo de trabajo y la reducción de jornada y todo lo referente a que el empleo debe ser el objetivo prioritario en los Presupuestos del Estado de 1999.

El secretario de Acción Sindical de UGT reconoció que hay otros aspectos derivados de la reforma laboral que pueden tratarse tripartitamente, pero desacó que existe el inconveniente de que no hay acuerdo con la patronal en estas materias, entre las que citó la penalización de los contratos temporales y la regulación de las empresas de trabajo temporal en actividades peligrosas.

Puig mostró su deseo de que de la reunión del lunes con Arenas se desprenda un talante de verdadera negociación futura sobre todas estas materias, y advirtió que de no abrirse esta negociación "entraremos en una fase por lo menos complicada".

Ferrer fue más pesimista y,dijo que el diálogo social "ha perdido fuelle". A su juicio, el Gobierno tiene "un problema grave, que es que su ideología le hace pensar que las políticas de empleo entorpecen el crecimiento económico". Para Ferrer, el Ejecutivo "difícilmente da la imagen de centro, ya que no cumple los mínimos de la cuestión social", por lo que le exigió que rectifique y reoriente su política social y convierta el diálogo en una verdadera negociación.

CEOE

Por su parte, Francisco Abendaño, del departamento de Relaiones Laborales de la CEOE, que también participó en las jornadas, hizo un balance positivo del primer año de la reforma laboral y apoyó el Plan de Empleo del Gobierno, aunque dijo que debería haber apostado más decididamente por el apoyo a la creación de nuevas empresas.

El representante de la patronal volvió a reclamar una rebaja de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social, y rechazó tajantemente la penalización de los contratos temporales a través de un aumento de las cotizaciones por dsempleo de estos contratos.

(SERVIMEDIA)
27 Mayo 1998
NLV