Ambos sindicatos consideran esencial que la nueva RTVE mantenga una estructura territorial adecuada y productiva de radio y televisión, y que evite la externalización de su programación y servicios digitales.

Entre las enmiendas presentadas hay una que pide que "la corporación RTVE y sus sociedades prestadoras de servicio público no podrán ceder a terceros la producción propia y edición de programas informativos y de aquellos que expresamente determine el mandato marco. La programación de RTVE impulsará la producción propia de su programación de forma que ésta abarque la mayoría de los programas difundidos en cada ejercicio".

También solicitan que la corporación RTVE disponga de una estructura territorial para poder atender las demandas regionales, contribuir al desarrollo de la cohesión interterritorial y potenciar el papel vertebrador del conjunto del Estado.