En una reunión que lo representantes sindicales de las federaciones estatales de Espectáculos mantuvieron ayer con miembros del Comité Asesor del Instituto del Cine, organismo que acredita la nacionalidad española de cualquier producción, UGT y CCOO consideraron excesiva la ayuda de 200 millones, ya que la participación artística de actores españoles es escasa.

Además, los líderes sidicales solicitaron al Ministerio de Cultura la realización de una auditoría para conocer como se justifica la aportación española, que en toal asciende a 1.000 millone de pesetas.

Con anterioridad, ambas fuerzas sindicales solicitaron acceder a los costes definitivos de la aportación económica española. Esta petición fue contestada ayer:"Dichos costes no están a disposición del Comité Asesor".

Esa negativa, "inaudita", según los sindicatos, "imposibilita la tarea de citado comité, que necesita dichos datos para emitir el correspondiente informe".

En el momento de conceder las subvenciones al cine español, sólo 11 de los 44 proyetos presentados obtuvieron el visto bueno del ministro del ramo, Jordi Solé Tura, de quien depende la última decisión.

El Comité Asesor del Instituto del Cine solicitó para la película de Scott 65 millones de pesetas, pero Solé Tura amplió la ayuda hasta los 200 millones.