Responsables sindicales consultados por Servimedia señalaron, tras el encuentro mantenido por responsables de ambas centrales con la dirección de Torras Papel, que el único interés de este plan es refinanciar la deuda a corto plazo de la papelera, sin tener en cuenta el futuro industrial y el mantenimiento de los puestos de trabaj.

Entre las medidas inmediatas recogidas en el plan figura la racionalización de las plantillas en las fábricas de Sant Joan, Sarriá de Ter, Celupal, Montaña y Leiza, así como en los centros de Estructura Industrial, Estructura Central y Estructura Comercial, lo que conlleva unos excedentes para 1993 de 743 puestos de trabajo.

El plan de reestructuración será presentado mañana a los bancos acreedores y cuenta con un periodo de aplicación de tres años. Los sindicatos ya han manifestado su intenció de no tomar niguna medida concreta hasta que no conozcan en pofundidad el documento con el que Torras Papel quiere convencer a las entidades financieras.

Con esta medida laboral, la papelera de KIO pretende convencer a sus creedores de la necesidad de renegociar su deuda ante la situación insostenible de la empresa.

El pasado mes de diciembre, la dirección de la compañía intentó un acuerdo de este tipo pero fue rechazado por las entidades de crédito afectadas. Paralelamente a esta medida, Torra Papel negocia la venta de su filial en Bélgica, la más endeudada del grupo (50.000 millones de pesetas).