Las autoridades spañolas no han calificado al área como "zona de protección especial para las aves" y tampoco ha sido clasificada por las autoridades científicas como "zona de importancia para las aves" en el inventario preparado para la organización Birdlife. Además, el Gobierno español no ha integrado dichos espacios en la Red Natura 2000, con lo que el asunto es de competencia nacional y regional.

Sin embargo, la futura construcción del aeropuerto ha sido criticada ante la Comisión por la eurodiputada de IzquierdaUnida Laura González Alvarez. Según la europarlamentaria, las obras producirán graves alteraciones de los ecosistemas de la zona, aparte de daños acústicos para la población.

Por otra parte, la eurodiputada ha asegurado que el aeropuerto carecerá de seguridad, ya que en la zona, situada entre montañas, se suelen formar habitualmente bancos de niebla, tanto por la mañana como por la noche, y está expuesta a vientos peligrosos.