Las enfermedades poco comunes son las que afectan a menos de 5 habitantes por cada 10.000. El acuerdo adoptado esta mañana permitirá un mayor nivel de protección frente a estas patologías, facilitando el acceso a la información y fomentando la cooperación transfronteriza.

Entre los datos que compartirán los socios europeos se encuetran la prevención, la detección rápida, los tratamientos y experimentos médicos o las consultas especializadas de algunos laboratorios. Este programa que comenzará previsiblemente en 1999 durará cinco años.

En este ejercicio también se pondrán en marcha los programa de prevención de accidentes y de lucha contra enfermedades relacionadas con la contaminación. Los ministros consideran necesaria la cooperación a nivel europeo para identificar y combatir la acción de partículas contaminantes y perjudiciaes para la salud. Este programa, que tendrá tres años de duración, tiene dos objetivos principales: ampliar la información y el conocimiento, y mejorar su diagnóstico y tratamiento.

Por otra parte el Consejo ha adoptado una resolución que defiende la incorporación de la protección de la salud a las demás políticas comunitarias. Este punto, estrechamente relacionado con el debate público de esta mañana será retomado en Londres, el día 19 de mayo durante una reunión extraordinaria convocada por la Presiencia británica. Allí se discutirá la mejor estrategia para aplicar el enfoque intersectorial y se analizarán las consecuencias de la ampliación comunitaria hacia el Este.

SELECCION DE LOS DONANTES

Asimismo, los ministros han adoptado una recomendación sobre las donaciones de sangre en la UE. Este texto establece criterios de elegibilidad de los donantes excluyendo grupos de riesgo como los ex drogadictos. También adopta una serie de medidas y sistemas de registro y análisis que aseguren el buen estdo de la sangre.

En otro momento de la reunión los ministros han recibido información de la Comisión sobre la encefalopatía bovina espongiforme (vacas locas), y han reafirmado la necesidad de implicar a todos los estado miembros en un sistema armonizado de vigilancia epidemiológica.

Durante el almuerzo se ha tratado de nuevo la posibiliadad de incluir criterios sanitarios en la elaboración de otras políticas, como sucede ya con el tema del empleo.