El objetivo es diseñar una estrategia operativa para que la Unión Europea yude a resolver los problemas del bosque tropical a través de varios programas, ya que, si bien el Viejo Continente no cuenta con este tipo de bosques, sí le conciernen.

La actual regulación comunitaria sobre bosque tropical llega a su término en 1999. La Comisión está evaluando el impacto de los programas llevados a cabo desde 1992 hasta 1996.

Por otra parte, la UE está preparando el informe anual sobre programas de desarrollo de bosques tropicales con un nuevo sistema de evaluación.

El infrme, que también será enviado al Parlamento Europeo y al Consejo de Ministros antes de fin de año, tendrá en cuenta todos los proyectos realizados en Asia y América Latina. Estos han sido financiados no sólo por la línea presupuestaria dedicada al bosque tropical, sino también con ayuda del Fondo de Desarrollo Europeo y pequeños presupuestos para varias organizaciones no gubernamentales.