Según la UCE, debería prohibirse toda venta de árboles y especies navideñas que no tengan acreditada su procedencia y no cuenten conla autorización pertinente de tala o explotación.

Bajo el lema "No permitas que corten un árbol, plántalo", la organización de consumidores propone el establecimiento de un sistema de certificado de procedencia controlada, semejante a los que existen en otros sectores, como el de la piel de origen controlada.

La UCE hizo también un llamamiento a los ciudadanos, apelando a su conciencia ambiental, "para que rechacen y eviten la adquisición de árboles naturales de procedencia dudosa y, en todo caso de aquellos que no se puedan trasplantar con posterioridad".

Asimismo, recomienda a los consumidores apegados a la tradición del árbol de Navidad que recurran a la amplia gama de árboles artificiales que ofrece el mercado, "más económicos a la larga", o, en su caso, elijan aquellos naturales que posteriormente puedan volver a ser plantados.

Además de instar a los ayuntamientos a poner en marcha en estas fechas campañas específicas para controlar la procedencia de árboles y otras especies típicasde la Navidad, la UCE les pide que sancionen a los responsables de ventas ilegales y establezcan mecanismos de recogida y repoblación una vez pasada la Navidad, una iniciativa puesta en marcha ya por muchos municipios.