Varela explicó que prácticamente todos los agentes del Consejo Asesor,presiddio por el ministroJosé Borrell, están de acuerdo en la necesidad de acabar con las subvenciones cruzadas en las tarifas telefónicas para preparar a Telefónica ante el proceso de libre de competencia previsto para 1998.

Sin embargo, señaló que, desde el punto de vista de la defensa de los consumnidores domésticos, la propuesta esbozada por Borrell de subir 5 pesetas las llamadas urbanas y reducir entre 35 y 40 las demás, "sólo mejoraría la relación de costes para los clientes industriales y no pra los domésticos".

El representante de la UCE añadió a Servimedia que los clientes domésticos deberían tener una compensación por este aumento de las llamadas urbanas, y señaló la rebaja del 50 por cien en la cuota de enganche y el abaratamiento de las llamadas urbanas para los usuarios domésticos durante una franja de escasa demanda.

La Unión de Consumidores entiende que sólo con medidas de este tipo los clientes de Telefónica notarán el ajuste en sus recibos sin que se resienta el volumen de ngocio de la compañía, ya que las subidas y bajadas se compensarían mutuamente, mientras que la rebaja de la cuota de conexión se compensaría con el rpevisible aumento de la demanda y de los tráficos.

Para la UCE, la revisión de las tarifas telefónicas que planea el Gobierno no ha salido de ser "una mera exposición de tendencias en las que todos estamos más o menos de acuerdo", pero "ahora que concretar el contenido de esa reestructuración y evitar que premie a unos consumidores en detrimento de otros"