En un comunicado, la UCE recuerda que durante el periodo de rebaja las condiciones de venta han de ser las mismas que durante el resto del año, exceptuando el precio, que obligatoriamente tiene que ser inferior, sin que esto suponga una merma en la calidad del producto".

Asimismo, ecuerda a los comerciantes la obligación de que, tanto en la etiqueta como en la publicidad, figure el precio rebajado acompañado del antiguo o bien del porcentaje de rebaja aplicado.

Entre las recomendaciones que UCE hace a los consumidores se encuentra la de exigir la factura de compra, cuya entrega es obligatoria y constituye el comprobante en caso de reclamación o de devolución.

La UCE recuerda que los comerciantes no tienen ninguna normativa que les exima de aceptar la devolución de los prodctos adquiridos en su establecimiento, como ocurre en otras épocas del año.

También insta al comprador a exigir las garantías debidamente cumplimentadas, cuando compren aparatos radiofónicos, electrodomésticos, ordenadores, etc. "La rebaja del precio no exime al comerciante de esta obligación", puntualiza la asociación.

Asimismo, aclara que hay que distinguir entre saldo y rebaja. El saldo es un producto defectuoso o de otra temporada que se vende a menor precio, pero las rebajas no son saldos. Finalmente, recomienda a los consumidores que no se dejen llevar por la publicidad, planifiquen previamente sus compras y adquieran aquello que realmente necesitan, y advierte que "de otra manera las rebajas le pueden salir caras".