El alcohol provoa un estado de relajación en las personas debido a la estimulación de la producción de una sustancia química del cerebro, la alopregnanolona, vinculada a la hormona reproductiva femenina progesterona.

En estudios realizado en animales de laboratorio, los expertos comprobaron que el alcohol causa la liberación de las hormonas del estrés, como la corticosterona y la progesterona. Además, descubrieron que el estrés incrementa los niveles del esteroide cerebral alopregnanolona, que actúa, a su vez, sobre l receptor GABA, reductor de la ansiedad.

Tras el análisis en roedores, los investigadores comprobaron que los niveles de alopregnanolona aumentaron considerablemente en los ratones a los que se les había dado etanol.

En sus conclusiones, los investigadores, dirigidos por el doctor Leslie Morrow, sugieren que el esteroide es el responsable del efecto sedante del alcohol, ya que, al tratar a los ratones con un fármaco que bloquea la formación de alopregnanolona, no se produjeron los mismos efectossedantes.

Asimismo, este hecho puede propiciar que las mujeres sean menos propensas al alcoholismo que los hombres, ya que necesitan beber menos alcohol para sentir los efectos, al poseer de forma natural altos niveles del esteroide.