En declaraciones a Servimedia, Gil Lázaro explicó que lo sucedido debe servir de reflexión a quienes pensaron que sentándose con "Txikierdi" se iba a lograr algo, "aun a costa de poner en entredicho", dijo, "el consenso esencial que se ha de dar entre las fuerzas dmocráticas en materia de lucha contra el terrorismo".

Tras subrayar que el entorno de ETA sólo buscaba "propaganda" con la entrevista, Gil Lázaro hizo un llamamiento para que en el futuro se eviten "errores de este calado" y para que los que tanto se han esforzado en hablar con un terrorista "pongan el mismo celo" para contribuir a agrandar la unidad y el consenso de todos los demócratas.

Igualmente, señaló que se equivocan los que han criticado la decisión del ministro del Interior de no recibira la delegación del Parlamento vasco y añadió que los que han cometido un error han sido precisamente los que "no supieron ver a tiempo que en todo este asunto no subyacía sino el interés de ETA de darse un balón de oxígeno a si misma".

Gil Lázaro se refirió igualmente al tiroteo ocurrido el pasado fin de semana en Bilbao para advertir que tal suceso no puede ser interpretado como un ejemplo de descoordinación entre las fuerzas de seguridad.

RESPETO COMPETENCIAL

En este sentido, defendió el papl desempeñado por la Guardia Civil en la lucha contra el terrorismo y destacó que este Cuerpo continuará actuando desde el "profundo respeto" a las competencias que en materia de seguridad tiene encomendadas la Ertzaintza.

Finalmente, Gil Lázaro expresó la solidaridad y el respaldo moral de su partido a todos los ciudadanos vascos y navarros, ante una nueva "ceremonia de chantaje que ETA y su entorno pretenden articular" a propósito de la convocatoria de huelga general.

"Es una magnífica ocasión" concluyó, "para que el pueblo vasco y navarro, en el uso legítimo de sus derechos, planten cara cara, serena y pacíficamente, a estos chantajistas, haciendo caso omiso de cualquier requerimiento, que ya se está produciendo en términos gansteriles".