"No quiero que Castilla y León pase a la historia como el primer gobierno en el que participe Vox", destacó el líder del PSOE en esta comunidad autónoma, en una entrevista en TVE recogida por Servimedia en la que remarcó que su "única línea roja es la extrema derecha" en el Ejecutivo autonómico porque no quiere que se "normalice" esa presencia en las instituciones.

Respecto a posible relación con el candidato de Ciudadanos, Francisco Igea, el dirigente del PSOE recordó que "ya prometió cambio" y terminó arropando un gobierno del Partido Popular. Hace dos años, dijo, "le cerró la puerta al cambio y ahora ha permitido la puerta abierta a Vox".

Tudanca se mostró "satisfecho" por la campaña electoral que hoy termina porque les ha permitido "hablar" de Castilla y León y sus problemas. Este aspecto, dijo, les "ha pasado factura" al Partido Popular porque apostó por "nacionalizar" los temas.

El dirigente socialista se mostró también confiado de su victoria el 13-F porque "ya sucedió" en 2019 y está "convencido de que volverá a suceder'. Así las cosas, insistió en que las "expectativas de cambio de van a cumplir el domingo", para lo que pidió una "confianza mayoritaria" porque el "cambio solo lo representa el PSOE".