Trujillo hizo esta afirmación en el marco del V Foro Inmobiliario, que se desarrolla hoy y mañana en Madrid organizado por el Instituto de Empresa.

La ministra explicó el contenido de la futura Ley del Suelo, cuyo primer informe aprobó el pasado viernes el Consejo de Ministros y que ahora se va a someter a consultas del sector y agentes sociales, y de comunidades autónomas y ayuntamientos, a través de la FEMP.

Resaltó que la ley persigue aumentar la transparencia del mercado de suelo, fortalecer la participación de los ciudadanos en la ordenación urbanística, fijar unos requisitos básicos de sostenibilidad y protección del medio ambiente y que el mercado de suelo sea "más eficiente y menos inflacionario".

Trujillo indicó que la anterior ley del suelo, de 1998, que perseguía abaratar el precio de los pisos, generó, por el contrario, un encarecimiento del 135% del precio de la vivienda y del 500% del suelo.

Ahora se persigue "hacer valer", junto al derecho de propiedad "hoy dominante", otros valores constitucionales como la libertad de empresa, el derecho a una vivienda o la protección del medio ambiente.

La ley aún en vigor, agregó la titular de Vivienda, "ha favorecido un desarrollo poco sostenible" tanto en términos medioambientales, como económicos y sociales, a través de un "mercado opaco" en el que algunos intereses generales no han sido bien protegidos.